sábado, 1 de octubre de 2011

DIEGO CAPUSOTTO EN LAS CUATRO SILLAS DE MAJUL


El mejor entrevistador que he visto en mi vida se llamaba Fabián Polosecki. Uno de los peores: Luis Majul.

Estuve viendo nuevamente la entrevista que le hizo a Diego Esteban Capusotto, en su programa Cuatro sillas, que consiste en que el entrevistador se siente en una mesa y haga sentar al entrevistado en cuatro sillas distintas: a) una de “estilo Luis XV” que es la cómoda, para las preguntas confortables; b) un banquito incómodo, diseñado para tratar temas “no digamos jodidos” pero sí espinosos, de difícil confesión; c) un pupitre, que refiere al pasado, a “la única época maravillosa de la humanidad, ya perdida, ya muerta” (Capusotto dixit); y finalmente d) una silla que simula el futuro, a la que Capusotto definió como un “útero de utilería”.


En el lugar incómodo le preguntó “¿qué es el humor para vos?”. Luego lo hace cambiar al sillón “Luis XV” que es el cómodo, y le pregunta “¿de qué te reís cuando te reís?”. Cambian las épocas, cambian los técnicos, cambian los jugadores, cambian las sillas, pero las preguntas se parecen, como los hijos y los padres en la canción de Serrat.

Después lo hace sentarse en el pupitre, donde Majul confiesa –de modo lateral y como quien no quiere la cosa- que en su escuela las mesas se salían y había compañeritos que aprovechaban para golpear la cabeza de sus prójimos.

¿Fue Majul el gil del curso? ¿Lo habrán golpeado severamente en el bocho? ¿Será ese el origen de sus investigaciones periodísticas?

Así y todo, la entrevista es muy entretenida, y las respuestas de Capusotto van del disparate a cierta profundidad filosófica. 


¿Qué me gustaría que me pregunten que no me hayan preguntado? Si querés cojer, básicamente.

¿Qué es el humor? 

Supongo que es una especie de respuesta, un ahuyentador de virus, lo más cercano a la sanidad... Supongo que es una mirada impiadosa de lo que nos circunda.

¿Es resistancia?

Probablemente sí, a la fatalidad... y a quienes nos empujan a la fatalidad también. Por eso digo que es una respuesta, porque también tiene siempre un sustento ideológico... Me refiero a que uno sabe de lo que se burla.

El humor como lenguaje que responde a para qué estamos acá y cuál es el sentido del universo, y que probablemente diga "nadie sabe nada, pero nos divertimos".

Me gusta mucho la definición de cultura que Hanna Arendt rescata de los romanos: persona culta es aquella que sabe “cómo elegir compañía entre los hombres, entre las cosas, entre las ideas, tanto en el presente como hacia el pasado”. ¡Qué bueno es estar acompañado por el humor de Diego Capusotto!

Entrevista primera parte.

3 comentarios:

  1. Mirá por You Tube la ¿nota? que Majuluis le hace a Fogwill, es un desperdicio ético y moral.

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  2. Jaja dále, gracias por la recomendación! La recuerdo... unas preguntas paéticas. La voy a mirar de nuevo.

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  3. Capusotto genio, Majul chiste!!!

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